No tiene que ser fácil pisar la alfombra roja de los Oscar siendo tan joven porque está claro que tienes que mantener cierta frescura y no puedes vestirte como Helen Mirren con tal de cumplir el protocolo, por lo que la elección de Chloë me parece perfecta, pero solo en teoría, porque cuando ves el look está claro que algo no termina de funcionar.
La elección de Miu Miu me parece muy acertada, porque la firma siempre tiene un carácter juvenil muy adecuado para grandes eventos, por lo que un vestido de la firma es una sabia opción. Sin embargo, las irregularidades en el atelier de la firma han jugado en contra de Chloë porque este vestido no ha dado un resultado de 10.
La reinvención y actualización del estilo casi pre-renacentista del vestido gracias al estampado lo hacían una apuesta de lo más interesante, y la verdad es que yo también habría pensado que Chloë podría hacerlo funcionar, pero es que simplemente creo que no le favorece lo suficiente. De hecho, creo que no solo no le favorece, sino que la supera y que al final es mucho vestido para Chloë.
Afortundamente no le vimos el clutch durante mucho tiempo, ya que ensucia más la imagen general y me voy a qudar con sus impresionantes joyas de Forevermark, de entre las cuales destaca un precioso ear-cuff.
Solo queda aplaudirle el riesgo, porque es cierto que fue de las pocas que no tuvo miedo de probar algo diferente.
Imágenes: Zimbio
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